La regla del 80/20 es uno de los conceptos más útiles en la vida y en la gestión del tiempo. También conocida como el principio de Pareto, esta regla, en pocas palabras, afirma que el 20% de las actividades supondrán el 80% de los resultados. Pero veámoslo con más detalle.
¿Qué es la regla del 80/20?
Esta regla lleva el nombre de su fundador, el economista italiano Vilfredo Pareto, que ya en 1895 se dio cuenta de que las personas de la sociedad parecían dividirse de forma natural en lo que él llamaba los «pocos vitales», el 20% que tenía dinero e influencia, y los «muy triviales», el 80% restante. Más tarde se dio cuenta de que prácticamente toda la actividad económica estaba sujeta a este principio, ya que el 80% de la riqueza de Italia en aquella época estaba controlada por el 20% de la población.
La regla 80/20 de Pareto puede aplicarse a cualquier situación.
¿Cómo aplicar el principio de Pareto?
El principio de Pareto es un concepto que sugiere que dos de cada diez elementos de cualquier lista de tareas pendientes tendrán más valor que los otros ocho elementos juntos. El hecho negativo es que la mayoría de la gente procrastina y se dedica al 80% menos importante que contribuye muy poco a su éxito.
Esto es lo que debería hacer para aplicar eficazmente la regla del 80/20 para la fijación de objetivos que aumentará tu productividad general:
– En primer lugar, toma un papel y anota diez objetivos.
– Pregúntate: «Si sólo hoy pudiera alcanzar uno de los objetivos de la lista, ¿qué tendría el mayor impacto positivo en mi vida?»
– A continuación, elige el segundo objetivo más importante.
– Al final de este ejercicio, habrás determinado el 20% más importante de tus objetivos y en ellos deberás centrar tus esfuerzos.
Antes de empezar a trabajar, en general, pregúntate siempre: «¿Entra esta tarea en el 20% de mis actividades?»
¿Eres gerente? Sin duda, te enfrentarás al reto constante de los recursos limitados. No es sólo tu tiempo el que tienes que maximizar, sino el de todo el equipo. En lugar de intentar hacer lo imposible, la aplicación del principio de Pareto permite comprender realmente qué proyectos son los más importantes, qué objetivos son los más interesantes para la organización y en qué tareas específicas hay que centrarse para alinearse con esos objetivos.
¿Eres autónomo? Es importante identificar a los mejores clientes, los que más pagan. Por supuesto, esto no significa poner todos los huevos en la misma cesta, pero una diversificación excesiva conducirá rápidamente al agotamiento. Por lo tanto, hay que centrarse en los clientes que representan un mayor ingreso y fortalecer esas relaciones a largo plazo.
¿Eres un empresario? La tentación de probar algo nuevo y emocionante siempre está ahí. No hay nada malo en ello, pero todo depende de tus objetivos: ¿intentas hacer crecer tu negocio actual o realmente quieres expandirte a otros mercados? Una mentalidad 80/20 ayuda aquí a mantenerse centrado en el plan estratégico.
Entonces, ¿qué 20 por ciento de tu trabajo impulsa el 80 por ciento de tus resultados?
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